Los perros son una de las mascotas favoritas de los seres humanos por muchas razones, pero muchas veces las personas se sienten cinofobia o fobia hacia ellos y no es fácil aceptar su convivencia o incluso estar cerca de ellos debido a ciertos traumas, entre otros.
Aunque a menudo son mascotas amigables y totalmente adorables, es inevitable que el trauma de las personas con los perros se pueda curar fácilmente.
Es algo que lleva un proceso y depende de que cada uno avance en dejar ir ese miedo que se conoce como cinofobia.
Contents
¿Qué es la fobia a los perros o cinofobia?
La cinofobia se puede definir como un tipo específico de miedo a los perros, por lo que es un miedo común que se presenta.
Otros miedos o fobias habituales son las fobias a las arañas (esto es lo que yo padezco) e incluso a las serpientes, que son los principales miedos que se presentan en millones de personas en todo el mundo.
Sin embargo, la cinofobia o miedo a los perros es una fobia que también está presente en gran parte de la población, aunque pocos creen en ella.
Pero, por supuesto, las posibilidades de encontrar perros a lo largo del día son mucho mayores, a diferencia de una serpiente o una araña, que no es tan común.
En este sentido, es algo que hay que superar para vivir con más serenidad y sin miedo que un perro, por muy dócil y juguetón que sea, se acerque a la calle con intención de jugar.
La cinofobia es más común en la mayoría de los casos en niños, pero los adultos también pueden padecerla.
Hay dos aspectos fundamentales que la convierten en una fobia posiblemente irremediable, como son:
- vivía una especie de Experiencia traumática durante la infancia con un perro.
- Fue generado por recomendación de otras personas adultos, animando a los niños e incluso a los adultos a ser más precavidos ante la presencia reiterada de cualquier perro.
También es importante señalar que este tipo de eventos pueden estar relacionados con algún tipo de proyección violenta que tuvo el animal y manifestó un episodio de violencia.
¿Cómo superar la cinofobia o el miedo a los perros?
Superar el miedo a los perros se puede hacer a través de diferentes acciones, como:
hablar con otras personas
La comunicación siempre ha sido la clave para poder superar diferentes situaciones, lo mismo sucede en el caso de la fobia a los perros.
Muchas veces, cuando el miedo se comunica a otras personas, el miedo puede comenzar a desvanecerse.
Según los estudios, las fobias y otras intervenciones tienen más éxito para superarlas después de expresarlas hacia otras personas, como los profesionales.
Evaluar el grado de miedo sentido
En primer lugar, para poder estimar el miedo a los perros, es importante saber si realmente se trata de una fobia o no.
Por ejemplo, si se puede tener en un lugar donde duerma un perro a unos metros de distancia y mantener la seguridad.
O si te sientes mal y crees que la situación se saldrá de control tan pronto como el perro se despierte y camine hacia ti.
Si es así, es muy probable que le tengas miedo a los perros, pero es normal y no patológico.
Reconoce los síntomas del miedo que estás sintiendo
Cuando comience a mostrar los síntomas de miedo que siente hacia los perros, debe pensar detenidamente si se trata de un miedo específico cuando el perro se acerca o cuando solo se acerca al lugar.
Tener la sensación de querer huir, no poder moverse del lugar, entre otras cosas, puede ayudarte a tomar las medidas más necesarias, siempre que se determinen los síntomas que estás experimentando.
Expóngase al miedo con la planificación
Para superar cualquier fobia, necesitas crear exposición al elemento que causa el miedo, en este caso los perros.
Esto ayudará a que esta fobia se vuelva mucho más resistente.
Una vez superada esta fase, los miedos comienzan a disminuir.

Notar:
Principales síntomas que genera la cinofobia
Cuando las personas tienen miedo a los perros, comienzan a generar diferentes episodios y síntomas, como la ansiedad de caminar por la calle y el miedo a que un animal se cruce en su camino.
Los dos síntomas principales de la fobia son el miedo y el pánico.
Entonces los latidos del corazón comienzan a acelerarse, hay problemas para respirar e incluso puede ser necesario huir rápidamente del lugar.
Por tanto, la sintomatología de este tipo de fobia no es diferente a cualquier otro tipo existente, pero lo que la hace diferente es que en este caso las personas tienen miedo de que un perro les ataque.
Como suele ocurrir con otro tipo de fobias, la cinofobia es un miedo que genera diferentes síntomas, como:
- Sudoración excesiva.
- boca seca
- Sensación de falta de aliento.
- Terror o miedo intenso.
- Problemas estomacales o dolores de cabeza.
- Angustia frecuente.
- Taquicardia.
- Conductas de evitación.
¿Por qué se produce la cinofobia?
En general, la cinofobia es un miedo que se produce después de que una persona haya tenido un episodio o una mala experiencia desde la infancia.
Puede ser porque lo experimentó directamente o porque estuvo presente ante el relato de un familiar en el que se le asocia con un perro, ya sea porque lo mordió o intentó morderlo.
También se genera por la intención de acariciar a un perro que no estaba suficientemente familiarizado con las personas.
Las personas no tienen que tener experiencias en primera persona para que la fobia comience a desarrollarse.
Con solo escuchar una anécdota, es posible que la persona comience a generar miedo a los perros.
Como se mencionó anteriormente, las personas eligen tener miedo simplemente por conocer la experiencia de los demás, por lo que la razón muchas veces se vuelve menos personal, pero esto no evita que surja la fobia.
En los casos en que los individuos han tenido malas experiencias en compañía de un perro, es posible que sean mucho más hiperreactivos a los estímulos con este tipo de animales.
Aunque, ciertamente, cuando las fobias se desarrollan desde edades tempranas, es probable que vayan acompañadas de otro tipo de fobias como el miedo a los insectos u otras mascotas, como los gatos.
¿Se puede superar el miedo a un perro? ¿Cómo hacerlo?
Cuando las fobias son el producto de momentos extremadamente intensos e impacientes para las personas, llevar una vida normal a menudo puede parecer un desafío a gran escala.
Por esta razón, es necesario comenzar a buscar ayuda de un profesional capacitado en la reducción del estrés por ansiedad.
Los psicólogos tenemos la capacidad de encontrar los tratamientos más adecuados para controlar diferentes fobias, especialmente aquellas que tienen una relación cognitivo-conductual y pueden tener un pronóstico mucho más favorable.
Se pueden implementar diferentes técnicas, siendo una de ellas la desensibilización sistemática.

Esta consiste en iniciar una persecución de las reacciones de las personas ante un estímulo aversivo, de manera que la ansiedad comience a disminuir paulatinamente.
Todo esto le produce una formación que le ayudará a controlar el tipo de ansiedad que presenta.
Durante las primeras sesiones se pueden utilizar fotografías, peluches, audios, finalizando con la etapa más importante y decisiva que es la presentación del animal que provoca la fobia.
Para llegar al final de esta larga terapia es importante que haya un alto grado de constancia, dedicación y esfuerzo.
¿Existe tratamiento para la cinofobia?
Las fobias son situaciones estresantes y ansiosas que pueden ocurrir en cualquier lugar, especialmente cuando se dirigen a los perros.
Estos son animales que se pueden encontrar en varios lugares y son grandes limitantes para las personas que sufren de cinofobia.
El estrés que una persona puede sentir al acercarse a un objeto, artículo, persona o animal que le provoca ansiedad y malestar puede incluso causar problemas de salud que deben ser atendidos con mucha rapidez.
No se trata solo del nivel psicológico, sino que el emocional y el físico también tienen una estrecha relación con el tema de las fobias.
Aunque hay ocasiones en las que la cinofobia empieza a disminuir con el tiempo, también hay muchas personas que no pueden conseguirlo y supone una gran limitación para ellas.
Por eso, en este caso, lo más importante es optar por terapia psicológica, entre otras.
terapia psicologica
Es una terapia con una exposición progresiva al objeto que produce la fobia.
Este es uno de los mejores ya que ha demostrado grandes beneficios a muchas personas que padecen este tipo de problema.
Lo ideal es combinarlo con otras terapias, como relajación, meditación, deporte, entre otras.
terapia de conducta cognitiva
Otra de las terapias que ha resultado muy eficaz para curar la cinofobia es la terapia cognitivo conductual.
Se basa en la capacidad de cambiar todos los patrones de pensamiento que tiene la persona que sufre la fobia y que tiene una percepción distorsionada de la presencia de un perro.
Tratamientos farmacológicos
No obstante, como último recurso, también existe la posibilidad de recurrir a tratamientos farmacológicos encargados de reducir todos los síntomas de ansiedad y nerviosismo.
Consejos para evitar un encuentro negativo con un perro
En algunos casos, seguir esta serie de consejos puede ser muy útil para evitar que se produzca un encuentro negativo con un perro, que puede provocar cinofobia.
En este sentido, recomendamos lo siguiente.
controla tus nervios
Los perros son animales con instintos cazadores o de presa, por lo tanto, cuando una persona elige huir o retroceder muy rápido, el perro la perseguirá.
Por supuesto, la mayoría no quiere hacer daño, muchos de ellos incluso lo toman como un juego.
Siempre será mejor ignorarlo.
En todo momento, es importante que mantenga la calma y parezca naturalmente estable.
Los movimientos repentinos, como levantar los brazos o estirar las piernas hacia ellos, pueden desencadenar una mordedura.
permanecer dominante
Los perros siempre buscan el control y por eso es importante que te mantengas firme y luzcas confiado cuando aparece un perro de aspecto dominante.
Sin embargo, es un detalle complicado, por lo que si te enfrentas al perro observándolo detenidamente, puedes lograr que el perro lo tome como un desafío de pelea.
Leer el lenguaje corporal del perro
Conocer el lenguaje corporal que exhibe el perro puede ayudarte a lidiar con situaciones en diferentes escenarios.
Cuando el perro comienza a moverse hacia la persona con la cola hacia arriba y las pupilas abiertas, la boca cerrada y las orejas apuntando hacia adelante, esto puede ser un mal indicador.
En este sentido, lo mejor y más recomendable será bajar la cabeza para evitar el contacto visual.
Ten cuidado con cómo lo acaricias
Para algunas personas, acariciar a un perro puede ser tan simple como acercarse a tocarlo, pero la verdad es que incluso tocar requiere aprender movimientos.
Cuando un perro interpreta que estás invadiendo su espacio, podría desencadenar un episodio de violencia.
Aunque para la persona puede ser solo una palmadita en la cabeza o en la frente, para el perro puede parecer un movimiento al que necesita reaccionar rápidamente.
conclusión
Todo está en la cabeza: he estado rodeada de perros toda mi vida y he acariciado a decenas de perros con los que me cruzo a diario, y nunca he tenido miedo.
Muchos factores deben confluir para que un perro quiera morder o atacar a una persona.
La gran mayoría de los perros están encantados de poder interactuar con los humanos y permitir que los acaricien y escuchen un tono de voz suave y afable.
Te animo a que superes tu fobia a los perros, porque una vez que la superes, descubrirás a los mejores seres de la naturaleza.